Un tema que suele encontrar a empresas y organismo con poco tiempo y planificación es el armado de stands o escenarios para actos públicos. Por eso presentamos este informe sobre los aspectos a tener en cuenta y cómo es el proceso de creación e instalación en todo el país.
Pablo Ruda, de la Comisión Directiva de la Asociación de Eventos de la Republica Argentina (AOFREP) explica qué es la arquitectura efímera y su importancia a la hora de planificar. Se llama arquitectura temporaria, a toda construcción arquitectónica que se diseña, produce y utiliza con un fin concreto, y luego se desarma. Un claro ejemplo puede ser el stand en una exposición de 4 días en un centro ferial, o la ambientación del espacio donde se va a realizar un evento social o corporativo.
Los profesionales del sector siempre se van actualizando en cuanto a diseño y materiales, y hoy se utilizan maderas, vidrios, hierro, melamina y MDF, pero también telas, lonas, pinturas, graffitis, cartón piedra, luces y muchos otros elementos, que cada vez más acercan estas construcciones temporarias a la escenografía en una obra de teatro.
En los eventos – tanto sociales como corporativos – la puesta en escena es cada vez mayor, y la arquitectura efímera se utiliza para ambientar los espacios contribuyendo a crear un entorno cómodo, agradable, diferente y aún sorprendente. Que invite a disfrutarlo, y que predisponga a los invitados – tanto si son clientes potenciales como si se trata de amigos y familia – a permanecer en él con una actitud receptiva.
La arquitectura temporaria es una herramienta pensada por los ambientadores, que forma parte de la idea creativa del evento. Por eso se debe consensuar entre el cliente, el ambientador y el organizador. La propuesta tiene que representar al cliente y su idea, de otra manera no sirve.
Se la debe proyectar según lo que el evento requiera, y se la debe diseñar y construir pensando en la mejor manera de transmitir el mensaje a comunicar.
Habitualmente el cliente desea que la idea sea innovadora, sobre todo en los eventos del ambiente empresario, en los que se busca sorprender a los invitados con la “puesta en escena”. Pero siempre hay que pensarla como parte de la propuesta, ya que desde la ambientación se puede comunicar la temática y objetivo del evento, incluso antes de que éste comience.
Por otro lado, si la arquitectura temporaria toma la forma del stand que una empresa o gobierno va a instalar en una feria o exposición, debe ser considerada una herramienta más para conseguir los objetivos comerciales o de comunicación. Por eso, su diseño deber ser parte de la estrategia integral de marketing y comunicación de la organización.
En algunos casos cumplirá una función solo institucional, mientras que en otros servirá como showroom o incluso deberá contar con algún espacio para poder mantener reuniones.
Hay que considerar que un stand es la materialización de un intangible, como una marca o una empresa, y desde la arquitectura se puede decir mucho.
Si un stand no tiene diseño, está todo desordenado y no cuenta con espacio suficiente como para que el personal atienda al cliente potencial de una manera adecuada, el público asistente puede percibir y trasladar esa sensación al funcionamiento integral de la empresa.
Aunque no se puede generalizar, es muy común que las empresas y organizaciones pidan innovación en el diseño y funcionalidad, según lo que necesiten. Por ese motivo, quien diseña y arma el stand debe tener muy en claro los objetivos a lograr, para conseguir la mejor propuesta y lograr que la inversión que realiza la empresa rinda sus frutos.
La arquitectura efímera debe ser pensada como mucho más que un espacio que se va a ocupar durante algunas horas o días, ya que tanto en un evento social o empresario, como en una convención o exposición, todo comunica.
Nota publicada en AreaUrbana 52