Atlas Copco Argentina, subsidiaria de la multinacional sueca y proveedor líder de soluciones industriales, conmemora su quincuagésimo segundo aniversario en Argentina.
Fundada en 1873 en Estocolmo, Suecia, para la fabricación de equipamiento para la industria ferroviaria sueca, Atlas Copco se ha convertido en un referente mundial en el suministro de compresores de aire y gas, generadores de gases industriales, equipos para tratamiento de la calidad de aire, herramientas eléctricas, soluciones de ensamble, productos de aseguramiento de la calidad, compresores transportables, grupos electrógenos, torres de iluminación, alquiler especializado y servicios afines.
En este gran recorrido, la innovación ha sido un pilar estratégico de su historia por lo que ha trabajado arduamente para convertir las ideas industriales en beneficios críticos y concretos para el negocio. En los últimos años la empresa ha invertido el 2.5% de sus utilidades en investigación y desarrollo, para introducir continuamente productos y servicios innovadores para aumentar la productividad y eficiencia de sus clientes, cuidar el medioambiente y posicionar a la multinacional a la vanguardia del mercado.
Atlas Copco acompaña la evolución de la industria argentina
En 1968 se funda Atlas Copco Argentina, un aliado estratégico de la industria local. La compañía, responsable por Argentina, Uruguay y Paraguay, ha sido el principal proveedor de equipamiento para grandes proyectos energéticos de nuestro país como centrales termoeléctricas, hidroeléctricas y nucleares, extracción de petróleo y gas.
• Complejo ferrovial Zárate-Brazo Largo (1971)
• Complejo Hidroeléctrico Futaleufú (1971)
• El puente General Manuel Belgrano, Chaco-Corrientes, (1973)
• La central hidroeléctrica Salto Grande (1974)
• El Gasoducto Central Oeste (1981)
• Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz (1981)
• Construcción del embalse de Alicurá o Alí Curá (1985)
•El Chocón-Cerros Colorados, (1993)
Por otro lado, la compañía participó en el desarrollo de proyectos energéticos y ciclo de combinados suministrando aire 100 % Oil Free para los sistemas de control, instrumentación de las centrales y aire para sellos en turbinas de gas en ciclos combinados. Algunos ejemplos de ello son: las Centrales eléctricas ubicadas en Manuel Belgrano, Matheu, Luján, Brigadier López, Ensenada Barragán, la Central termoeléctrica en Vuelta de Obligado Tambúes y la Central Puerto Planta de Cogeneración San Lorenzo.
“Nuestra esencia es proveer productos y servicios enfocados en la sustentabilidad, capaces de aportar eficiencia energética, seguridad y ergonomía,” señala Pablo Adaniya, Director General de Atlas Copco Argentina y Gerente General para el área de negocio Técnicas en Energía Comprimida. “Promovemos el desarrollo de nuestro talento que hace que las cosas sucedan,” continúa Adaniya, “y como ciudadano corporativo, nos esforzamos para entregar valor a nuestra comunidad y proteger al máximo el medioambiente, con una mirada puesta en las generaciones futuras.”
En la compañía, cada innovación empieza con una idea y las ideas son desarrolladas por personas apasionadas con un objetivo común: hacer una diferencia real y contribuir a la calidad de vida de la gente en todo el mundo. Si bien, sus equipos no siempre son visibles su contribución se pueden ver en todas partes: en la elaboración de alimentos; la fabricación de productos farmacéuticos y paneles solares; el ensamble automotriz y de dispositivos móviles; el soplado de vidrio; la iluminación de estadios, el desarrollo de conciertos o la fabricación de nieve para canchas de esquí; la respiración de los enfermos durante la ventilación mecánica o su monitoreo durante una internación; en el sabor del café, la cerveza o el Malbec.
La empresa en el mundo
Atlas Copco tiene 39 mil empleados y un alcance global con clientes en más de 180 países, en industrias como alimentos y bebidas, farmacéutica, metalúrgica, textil, petroquímica, automotriz, electrónica, aeronáutica, de la construcción, el petróleo y el gas y de proceso, entre otras. Las principales unidades de desarrollo y fabricación de productos están ubicadas en Bélgica, Estados Unidos, China, Corea del Sur, Alemania, Italia y el Reino Unido.
El espíritu innovador de la compañía se ha reflejado en todo lo que ha hecho a través de su historia. Algunas historias de innovación que lo demuestran son:
• Polo Sur, llegada de la primera expedición: liderada por el explorador noruego Roald Amundsen, la expedición llegó en 1911 con una embarcación equipada con un motor Diesels Motorer de Atlas Copco.
• Abu Simbel, Egipto: uno de los proyectos de desarme y traslado más grandes y espectaculares del mundo para rescatar los antiguos templos egipcios entre 1964 y 1968, confió en Atlas Copco y otras empresas suecas para el rescate.
• Dinosaur Cove, Australia: en 1984, el equipamiento provisto por Atlas Copco para un proyecto de excavación en este yacimiento ayudó a encontrar restos de un dinosaurio y en agradecimiento hoy lleva su nombre: Atlascopcosaurus Loadsi. ¡No todas las compañías tienen una especie de dinosaurio que lleva su nombre!
Con su alcance mundial, Atlas Copco influye en el desarrollo económico y social de los países en los que opera. Por ello, se esfuerza para ejercer una influencia positiva, actuando según los más altos estándares éticos y garantizando que los empleados, socios comerciales y otros grupos de interés claves los apliquen. Agua para Todos, la principal iniciativa de participación comunitaria del Grupo, ha llevado agua potable a más de dos millones de personas en todo el mundo desde su fundación en 1984.