En una nota exclusiva con la Arq. Diana Cabeza, presenta las novedades para el mercado de mobiliario urbano. Además, explica el desafío por encontrar nuevos diseños que se integren al diverso paisaje que presenta la Argentina.
¿Cómo ha comenzado el año para Estudio Cabeza?
El año 2019 comenzó con mucha presencia a nivel nacional, habiendo equipado espacios urbanos emblemáticos y de escala media en municipios y localidades de las provincias de Mendoza, Santa Fé, Córdoba, Entre Ríos, Catamarca, Tucumán, Neuquén, por nombrar sólo algunas…También estuvimos presentes en provincia de Buenos Aires, Gran Buenos Aires y ciudad de Buenos Aires.
Es importante destacar que en la Ciudad de Buenos Aires terminamos de equipar la estación de Constitución, el Aeroparque, la Plaza Congreso y el nuevo Paseo Costanera Norte con el monumento a Cristóbal Colón
¿Qué novedades tienen para presentar en el mercado argentino?
Este año hemos lanzado la línea “Huellas”. Es un sistema de asientos que constituye una nueva exploración en cuanto a usos y apropiación. Este modelo se refiere con el concepto de soportes que reciben y alojan al cuerpo.
Diseñada en hormigón armado, la línea “Huellas” aprovecha los mejores atributos de porte estructural y maleabilidad de este material al permitir crear la forma deseada.
El hormigón se trabaja de una forma superadora en la que se mitigan y desmaterializan sus características táctiles, visuales y de temperatura, acercando el cuerpo a un contacto suave, cálido y amigable con el soporte.
Es un sistema de unidades apareables entre sí en el sentido del largo y ancho, creando tanto una alfombra de usos, como un sistema con escala para un abordaje urbano o paisajístico.
¿Dónde podría inscribir este modelo?
Este elemento se inscribe en la línea de “Espalditas” que se lanzó hace dos años y tuvo su estreno en el Planetario de Buenos Aires. Son respaldos para compartir, charlar y descansar.
Pensadas en dos versiones diferentes, sirven tanto como soportes neutros para mirar las estrellas a cielo abierto y dibujar sus constelaciones con la mirada, como también en su versión más alta y corta para mirar el horizonte, además de funcionar como respaldo para encontrarse y charlar. El concepto se basa en explorar el cuerpo y resolver soportes que funcionen como capas entre el cuerpo y el soporte de uso.
Este elemento tiene su antecedente en el Concurso ganado de la ciudad Judicial en Tierra del Fuego
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