En un esfuerzo por transformar y mejorar los espacios dedicados a la administración de la justicia en la tercera Circunscripción de la Provincia de Neuquén, se llevó a cabo el Concurso Nacional de Anteproyectos del Complejo Judicial Zapala, el cual busca propuestas innovadoras que combinen diversas ideas y capacidades enfocadas en políticas de desarrollo público.
La iniciativa impulsó la creación de un complejo judicial que, además de ser funcional y eficiente, también pudiera generar un sentido de pertenencia e identidad entre los habitantes de la región. Así, a través de una imagen renovada de la justicia neuquina, la acción buscó fomentar la participación conjunta del Poder Judicial de la Provincia de Neuquén, el Municipio de Zapala y el Colegio de Arquitectos de la Provincia del Neuquén.
El proyecto que resultó ganador en el concurso fue llevado a cabo por los arquitectos: Carlos Menna, Juan Basso y Lorena Eguiguren, y abordó con precisión y creatividad los desafíos inherentes a la inserción de un equipamiento público de alta densidad y complejidad programática en un entorno urbano en consolidación. La propuesta se destacó por su enfoque integral y equilibrado, que dispuso entre sus objetivos satisfacer las necesidades funcionales del Poder Judicial, mientras fortalece las relaciones sociales y comunitarias en la ciudad de Zapala.
El jurado del concurso valoró el abordaje integral de los objetivos planteados y la propuesta de una arquitectura que asume y amplifica las capacidades transformadoras del espacio urbano junto con el público. “La propuesta resuelve con cuidado la inserción en el entorno, generando actividad en todos sus frentes y clara identificación programática desde el espacio público. La claridad en la organización funcional y espacial del programa, junto con su alta flexibilidad y posibilidad de transformación, son aspectos destacados”. Así fue que el concurso, que culminó exitosamente, cumplió su objetivo manifestado inicialmente de modernizar la infraestructura judicial, y a su vez fortalecer los lazos sociales y comunitarios en la ciudad de Zapala.
- Un edificio en equilibrio con su entorno
La construcción del nuevo Complejo Judicial Zapala (CJZ) presenta un desafío arquitectónico importante: integrar un edificio de alta densidad programática en un entorno urbano que se caracterice por su escala residencial. El proyecto ganador del Concurso Nacional de Anteproyectos, busca alcanzar esta meta mediante una propuesta integral que prioriza la creación de espacios públicos de calidad, la eficiencia energética y la flexibilidad funcional.
El diseño del complejo está basado en tres premisas fundamentales: una escala adecuada, la creación de espacio público y la eficiencia energética. El proyecto, que se desarrollará en dos etapas y contará con una superficie total de unos 13.300 metros cuadrados, busca llegar a una inserción armoniosa en el entorno, evitando un impacto visual negativo.
La propuesta incluye amplios espacios públicos alrededor del edificio, como una plaza pública, una rambla de acceso y un anillo perimetral verde, es decir, aspectos que fomentan la interacción entre el edificio y la comunidad, y contribuyen a la calidad de vida urbana. En cuanto a la eficiencia energética, el proyecto tiene incorporadas estrategias bioclimáticas como la ventilación cruzada, la iluminación natural, los parasoles y las cubiertas verdes para controlar el clima y reducir el consumo energético.
La organización funcional del complejo judicial de Zapata, se distribuye en tres barras paralelas que albergan las distintas áreas del edificio. Esta disposición optimiza la circulación interna de las personas y promueve la independencia funcional entre las áreas, sin perder la unidad del conjunto. Se presta especial atención a la definición de los ingresos y las circulaciones, distinguiendo entre lo público y lo privado. La separación física de los distintos accesos permite jerarquizar y diferenciar las circulaciones, garantizando la seguridad del complejo.
Consideración comunitaria y sustentable
El nuevo Complejo Judicial de Zapala no solo albergará las funciones judiciales de la ciudad, sino que también se convertirá en un espacio público de calidad que pueda fomentar la interacción y el bienestar de la comunidad. Con su énfasis en la creación de entornos públicos cálidos y la eficiencia energética, el diseño del edificio responde a las necesidades y desafíos del contexto urbano en el que se inserta, presentándose como un modelo de arquitectura pública comprometida con la sostenibilidad y la calidad de vida urbana.
Para minimizar el impacto ambiental del edificio y optimizar el uso de los recursos naturales, el proyecto incorpora una serie de estrategias de sustentabilidad. Estas incluyen dispositivos naturales para el control climático, como un sistema de vegetación que actúa como filtro entre el edificio y el entorno, regulando la temperatura y la iluminación natural. También se emplean dispositivos arquitectónicos, como parasoles de aluminio perforado, para controlar la radiación solar y evitar el deslumbramiento. Además, se seleccionan materiales y técnicas de construcción que promueven la eficiencia energética y la sostenibilidad.
Memoria de los autores
Los autores encargados de llevar a cabo el proyecto, remarcaron que uno de los principales desafíos se encuentra en la definición de la escala del nuevo edificio en Zapala, tanto a raíz de la relación formal con la ciudad existente como en el impacto que pueda tener en la conformación del espacio público. Encontrar una escala edilicia acorde, con espacios regulados y accesibles, es clave para garantizar la viabilidad y sostenibilidad del proyecto.
“Nuestra propuesta no busca imponerse desde la singularidad y monumentalidad, sino priorizar la neutralización del impacto mediante un edificio en equilibrio con la escala del entorno. La configuración arquitectónica resultante sintetiza el desafío de armonizar un programa de alta densidad con un entorno urbano caracterizado por su escala residencial, promoviendo transiciones adecuadas y relaciones equilibradas que mitiguen los impactos visuales y establezcan condiciones para la apropiación comunitaria de los espacios intermedios”, expresaron los autores.
La configuración del proyecto del nuevo Complejo Judicial Zapala aspira a conciliar dos variables aparentemente incompatibles: en primer lugar, se busca promover la independencia funcional entre las distintas áreas, sin descuidar la unidad del conjunto con el objetivo de optimizar y compartir recursos. Por otro lado, se busca propiciar ambientes y espacios de calidad tanto para los empleados como para el público en general, impulsando un complejo edilicio con perspectivas de crecimiento claro y ordenado. La organización del programa se ha regido por una lógica estructural y constructiva racional y eficiente que busca la optimización de características operativas, funcionales, espaciales y de consumo energético. La disposición de plantas amplias va a favorecer a las sinergias en el trabajo y eficiencia en los procesos productivos, optimizando el manejo y control de las instalaciones y determinando un marco para un diseño arquitectónico operativo, flexible y modular.
La ubicación y optimización del área de subsuelo tienen como objetivo ampliar las áreas de espacio público accesible en sus dos niveles. Además de albergar dependencias complementarias al Fuero Penal, el subsuelo incluye espacios técnicos, espacios comunes y estacionamientos para magistrados y funcionarios.
La flexibilidad del diseño se refleja en la capacidad de los espacios para adaptarse a diversos requerimientos de uso y particiones, orientándose hacia un concepto de trabajo dinámico. Se van a emplear estructuras abiertas que fomenten la comunicación interna horizontal, evitando la segregación y facilitando cambios en las agrupaciones de trabajo. La modularidad del diseño se basa en un módulo estructural de 7.32×7.32 metros para los principales cuerpos edilicios, un submódulo de 3.66×3.66 metros para el Gran Hall, y la posibilidad de combinarlos con un múltiplo elemental de 0.61×0.61 metros, lo que permite una coordinación modular necesaria y flexibilidad en la disposición de los espacios.
Estrategias claves
Los puntos claves del proyecto del nuevo Complejo Judicial de Zapala son fundamentales para entender su implantación estratégica. En primer lugar, la condición como edificio exento y su posición dentro del lote definen un sistema de relaciones con las preexistencias, consolidando la inclusión de espacio público de calidad en un área en desarrollo. La segmentación del edificio permite ampliar el espacio público perimetralmente, estableciendo las transiciones necesarias entre el complejo y el barrio en el que se sitúa, lo que aumenta su área de influencia y establece vínculos con el entorno inmediato, especialmente con los bulevares.
La disposición estratégica del proyecto aprovecha el desnivel para crear dos espacios públicos accesibles, destinando el 60% de su cota cero a espacios abiertos, puesto que la plaza pública que se encuentra sobre calle Buenos Aires es un área de vinculación ciudadana clave que conecta ambos bulevares.
La organización funcional del complejo busca, además, promover la independencia funcional entre las distintas áreas sin descuidar la unidad del conjunto, optimizando y compartiendo recursos, así como propiciando ambientes de calidad tanto para empleados como para el público en general, estimulando, a la vez, un crecimiento ordenado del complejo edilicio. La distribución del programa persigue la eficiencia operativa, funcional, espacial y energética, favoreciendo sinergias en el trabajo y eficiencia en los procesos productivos mediante la disposición de plantas amplias.
Por último y no menos importante, la estrategia de preservación ambiental se enfoca en la disposición de dispositivos naturales y arquitectónicos para el control climático y la eficiencia energética. Un subsistema vegetal y parasoles en aluminio perforado, van a funcionar como reguladores climáticos pasivos y activos, contribuyendo al ahorro energético y la seguridad.
Ficha técnica
Nombre: Concurso Nacional de Anteproyectos Complejo Judicial Zapala
Primer premio: Dinamo Arquitectura – Arq. Juan M. Basso, Arq. Lorena Eguiguren, Arq. Cai Menna.
Entidad Organizadora: Regional 2 del Colegio de Arquitectos de la Provincia del Neuquén (CAN)
Entidad Auspiciante: Federación Argentina de Entidades de Arquitectos (FADEA)
Entidad Promotora: Tribunal Superior de Justicia de la Provincia del Neuquén
