“Soy la primera mujer intendente de General Arenales y la primera en haber ganado tres elecciones consecutivas”

Se trata de uno de los 135 partidos de la provincia de Buenos Aires. Está ubicado a 320 km de la ciudad de Buenos Aires y a 377 km de la capital provincial, La Plata. Limita con los partidos de Colón, Rojas, Junín, Leandro N. Alem y la provincia de Santa Fe.

AreaUrbana dialogó con Erica Revilla, quien está al frente del municipio en la actualidad, habló de los problemas, el vínculo con los gobiernos provinciales y nacionales entre otros temas

¿Cómo evalúa la situación socioeconómica del municipio?

Ordenar toda esta situación de inflación que estamos viviendo es complejo, pero estamos muy coordinados, tenemos un buen equipo económico. Ahora estoy en mi tercer mandato, que comencé en el mes de diciembre de 2023, y estoy muy conforme con mis funcionarios porque no tenemos deudas, las cuentas están al día y esto hace que podamos llevar muy bien las situaciones diarias. Hay muchos proyectos e ideas, pero debido a la situación económica e inflacionaria del país, no podemos pensar en grandes obras sin presentarlas en la provincia o en la Nación.

¿Cuáles son las obras más importantes realizadas en su mandato?

Se han llevado a cabo muchas obras desde que estoy liderando el municipio. Las más solicitadas por la gente son los servicios. Tenemos un distrito de aproximadamente cinco mil habitantes, y cada una de las localidades que lo conforman están a alrededor de dos kilómetros de distancia, y son muy parejas en cuanto a la cantidad de población. Más allá de que la cabecera es General Arenales, a la hora de proyectar obras también se piensa en cada una de ellas. Nos hemos puesto como prioridad trabajar en obras como las cloacas, el agua potable y otras obras de infraestructura, y hemos logrado mejoras significativas. Por ejemplo, en una localidad llamada Arribeños, no había ni siquiera una cuadra con el servicio de cloacas y ya estamos por culminar la obra en toda la localidad.

También tenemos proyectos para llevar líneas eléctricas y la instalación de más de 1800 pantallas solares, entre otros. En 2017 nos enfrentamos a un gran caudal de agua proveniente de las lluvias y de las cuencas, lo que provocó el desborde del arroyo que cruza toda la localidad. Hubo varios cortes de las alcantarillas, lo cual fue problemático debido a las producciones de maíz y trigo en todo el camino rural de la zona núcleo. Logramos construir una ruta que era una obra esperada por años, así como un canal aliviador paralelo. También hemos reparado el acceso a la localidad de Ferré, la ruta 50 y su repavimentación completa hasta el límite con Colón.

Además, hemos construido el acceso a la localidad de Ascensión y realizamos la obra de toda la avenida Neuquén. También se han construido nuevos puentes en varios lugares del municipio. En cuanto a obras de salud, logramos la terapia intensiva del hospital municipal, renovamos todo el sector de pediatría, instalamos nuevos quirófanos y dependencias, y pudimos habilitar el mismo por parte del Ministerio de Salud. También conseguimos una ambulancia de alta complejidad. Todo esto se logró antes de la pandemia, por lo que estábamos preparados cuando llegó.

En educación, inauguramos un jardín maternal y mejoramos la infraestructura escolar.

¿Por qué cree que la gente confía en usted y pudo ser reelegida en su cargo frente a la intendencia municipal?

Porque ven en mí a una mujer que gestiona, que persigue objetivos y los cumple. Soy la primera mujer intendenta en mi distrito y también la primera en haber ganado tres elecciones consecutivas.

¿Cómo hace para conciliar su vida política con la familiar?

Al comenzar mi carrera política fue complejo porque mis hijos estaban en el colegio secundario. No querían exposición y no les gustaba que hablaran de su madre como una mujer política. Aunque siempre entendieron y crecieron con una mamá y un papá políticos (mi esposo también fue funcionario en otro gobierno), era complicado porque la madre no estaba con ellos las horas que tenía que estar. Por ello, como toda mujer, fui multifunción y traté de estar presente siempre en mi casa para atenderlos, que pudieran tener comida casera, cuidado de su ropa y atención diaria, porque creo que estas circunstancias nos marcan a todos desde niños. Esas cosas no se olvidan cuando uno es grande y yo no quise perderme esos momentos. Hoy mis hijos están en la universidad, los veo los fines de semana, lo que me permite conciliar bastante bien la política con mi familia. Le dedico mucho tiempo al municipio, muchas veces estoy hasta 20 horas seguidas trabajando, y vivo a cuatro cuadras del edificio municipal. Soy una apasionada de la gestión, me gusta recorrer cada uno de los pueblos, y cuando llego a casa seguimos hablando de gestión. Puedo estar todo el tiempo hablando del municipio porque me gusta mucho y tengo vocación por lo que hago.

¿Le gustaría que sus hijos también siguieran una carrera política?

Me gustaría que sean lo que ellos quieran. En mi casa nunca se habla de un partido o de una ideología, mis hijos son muy críticos. Los dos estudian derecho, no sé qué harán, pero me gustaría que elijan lo que les apasione y trabajen en ello. Mis padres eran empleados y siempre me decían que estudiara, que me profesionalizara, y que no hay nada más lindo que hacer las cosas que nos gustan. A veces uno no tiene opciones porque hay que trabajar y traer un ingreso a casa. Por eso me siento afortunada, porque hice de todo y ahora estoy feliz con lo que hago. No soy de los que piensan que se ejerce la política para enriquecerse personalmente o para vivir de esto, creo que estamos de paso y por eso uno tiene que dar lo mejor de sí.

¿Se ve hoy en otra actividad que no sea la política?

La verdad es que soy una persona versátil. He hecho de todo. Aunque soy abogada, crecí con mi mamá que tenía un negocio de bisutería y lo continué durante un tiempo después de su fallecimiento. También vendí celulares cuando recién me casé y cuando mis hijos eran pequeños. Es decir, que soy una persona que se reinventa y siempre está explorando. Me gusta mucho todo lo relacionado con la gestión municipal, también fui senadora provincial, pero pienso que los lugares en la política deben estar para cambiarle la vida a la gente y lograr algo. Cuando descubrí la gestión municipal, me enamoré. Aunque la actividad legislativa es interesante, cuando uno viene del territorio y está cerca de la gente, no hay nada como poder resolver los problemas que afectan la vida cotidiana y el desarrollo de la localidad. No hay nada más gratificante que cumplir con los objetivos que uno se propone.

¿Se ha sentido discriminada alguna vez por ser mujer y política, teniendo en cuenta que la mayoría de los políticos son hombres?

No sé si la palabra es discriminación, pero las mujeres hoy en día tenemos que estar demostrando todo el tiempo y no es fácil porque las reuniones políticas suelen ser tarde en la noche, y cuando una es madre o esposa, eso se complica aún más. Me he ido acostumbrando a todo este mundo y considero que esta situación está cambiando, y también es reconfortante cuando te reconocen en tu trabajo.

¿Cómo se ve dentro de diez años?

Me veo trabajando, porque creo que es lo que le da vida a una persona, lo que le da energía. Me veo con muchos proyectos y espero poder transformar realidades. Eso es lo que me gusta, estar en lugares donde pueda lograr que otros se sientan bien. Para mí, la política es servicio y transformación. Siempre les digo a mis funcionarios que deben soñar de forma permanente y no hacer siempre lo mismo, porque soñar es lo que nos da proyectos e ideas para cumplir nuestros objetivos.

¿Se ve en General Arenales o en otro lugar?

No lo sé, pero te contaré algo. Cuando era niña, soñaba con escribir poesías, cuentos e historias, y pensaba en casarme, tener hijos, obtener un título y ejercer una profesión. Era como el personaje “Susanita” de Mafalda. Pero la verdad es que todo resultó al revés, aunque las cosas se fueron dando. Entonces siempre pienso que es bueno dejarse llevar porque disfruto de eso. Lo único que tengo claro es que la vida me encontrará trabajando siempre, porque cuando deje de ocupar mi mente, seguramente llegarán las angustias y las depresiones, y por eso creo que uno siempre debe estar ocupado. Amo lo que hago, me encanta la política para transformar la vida de la gente. Los que vivimos en el interior tenemos mucha cercanía con la gente. El municipio tiene una sola puerta de entrada y salida. Sabemos que nos podemos encontrar con los vecinos, debajo del pino de la plaza, o cuando voy en bicicleta a la municipalidad o hacer un mandado, siempre algún vecino se acerca para comentarme sus problemas. Estamos atendiendo a la gente de forma permanente y cuando algo sucede, estamos muy cerca. Eso es lo maravilloso de la política.

¿Por qué la gente debería conocer General Arenales?

Nuestro municipio tiene una Mar Chiquita que supo ser la número uno en la provincia de Buenos Aires en el sector pesquero, y además tiene un pueblo muy pequeño en el que convergen católicos con sirios, manteniendo la cultura de sus lugares de origen. Realizan ayunos, muestran sus bailes típicos, exhiben sus comidas y es un distrito único. También en General Arenales se encuentran la mejor carne y los mejores salamines. Además, los visitantes pueden encontrar en nuestro municipio una escuela salesiana donde los chicos producen los mejores quesos de la zona, y así tenemos para ofrecer a los visitantes todos los productos caseros. Somos buena gente, que se reúne en un complejo denominado La Salada, un lugar de esparcimiento. Se vive tranquilamente y siempre esperamos a los visitantes.

JOSÉ A. LEMOS

 

  Compartir en:

José Abel Autor

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Gracias por su comentario !