Acciones para mitigar el cambio climático

El cambio climático es una realidad que ya se percibe en los municipios y de a poco se van concretando acciones para mitigarlo. Desde planes en ganadería, eficiencia energética, manejo de residuos o transporte, el compromiso argentino se fijó en la reducción de un 18% de los gases de efecto invernadero para el 2030. El esfuerzo debe ir mucho más allá.

 En la última Cumbre del G7, realizada en Francia en el mes de agosto, António Guterres, Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alertó que en la cuestión climática “se está peor que en la Cumbre de París de 2015”.

El líder mundial declaró que se necesita más voluntad política de los países para hacer frente al calentamiento global, y recordó que julio de este 2019 fue el mes más caliente del que se tenga registro; expresó que los informes de la Organización Meteorológica Mundial aseguran que el nivel de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera es el más alto en la historia y que el glaciar de Groenlandia, el segundo más grande del planeta, se derrite a un ritmo “alarmante”: sólo en julio se fundieron 179.000 millones de toneladas de hielo. “Todo parece indicar que el lustro 2015-2019 será el de temperaturas más altas. Si vemos los incendios en Siberia, Alaska, Canadá y Groenlandia en el Círculo Polar Ártico, sumamos 50 megatoneladas de emisiones de CO2 en junio y 79 megatoneladas en julio. Y ahora vemos lo que está pasando en el Amazonas”, advirtió.

Lo del calentamiento global no es una novedad, y desde aquella Cumbre de París en 2015 cada país se comprometió a reducir sus emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI).

En el caso argentino, la propuesta fue de reducir no menos de 18% sus emisiones, lo que significa una base de 109 millones de toneladas de CO2, más un agregado de 114 millones mitigadas para el 2030. Actualmente, el país es el número 29 en el ranking global de emisiones y su nivel representa sólo el 0,7% del total.

Aún con mucho para hacer, las acciones se están enfocando principalmente en una mayor mitigación y eficiencia en la actividad agropecuaria y el uso de los recursos naturales. En ese rubro se explica el 44% de las emisiones, mientras que la generación energética provee un 27%. Los otros sectores aportantes son el transporte, la industria y el manejo de residuos.

Residuos y eficiencia energética

En el caso del municipio mendocino de Godoy Cruz, el Gobierno local decidió avanzar fuerte por dos ramas: por un lado, por el recambio del sistema eléctrico, con fuentes renovables como la energía solar, y por el otro, por el manejo eficiente de los residuos.

Una de las acciones en este último caso fue la recolección de más de 2300 kilos de residuos eléctricos y electrónicos, en una acción que se extendió por cuatro días, en donde los vecinos depositaron equipos en desuso como CPUs, teclados, televisores, cámaras, cassettes, filmadoras, auriculares y todo tipo de dispositivo, además de pilas. La recolección se realizó en los barrios de La Estanzuela, Parque Benegas, Bulevar San Vicente y el espacio verde Luis Menotti Pescarmona, y actualmente ya disponen de dos puntos fijos para residuos electrónicos y cuatro para pilas y baterías.

La campaña se enmarca dentro del programa de clasificación de residuos que el Municipio lleva adelante. Hasta este año, la clasificación en origen era obligatoria en determinadas zonas, pero a partir del año que viene lo será para todo el municipio. Además, en plazas, parques, escuelas y polideportivos, hay distribuidos alrededor de 130 puntos “verdes” destinados al reciclaje, una política que comenzó allá por 2013 y que incorpora también las dependencias municipales. “Cada vez vemos que la gente está más interesada en clasificar y reciclar más residuos. Está creciendo mucho por eso estamos dando charlas en escuelas a los chicos de cómo clasificar, así como en los barrios, haciendo concursos por redes sociales y difundiendo información en base a encuestas. El cambio climático es una realidad que afecta a todos. Acá en Mendoza estamos pasando por una de las sequías más prolongadas que se tengan registro, con una disminución del 11% de lo llovido y nevado en lo que va del año, lo que va a generar desabastecimiento de agua en verano, y con temperaturas que pasan de 35 grados a menos 1 grado en un día”, sostiene Leonardo Mastrángelo, Director de Ambiente y Energía del municipio.

MANUEL PARERA

 

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José Abel Autor

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