A partir de una iniciativa del Instituto de Vivienda de la Provincia de Buenos Aires, distintas entidades, como el INTI y la Universidad Nacional de La Plata, trabajan para concretar la construcción de cuatro viviendas bioclimáticas en un municipio bonaerense. El ahorro energético y el cuidado del ambiente son los objetivos principales.
En el corazón de la Provincia de Buenos Aires, en su centro geográfico, se encuentra el municipio de Tapalqué. Allí es donde el Instituto de Vivienda de la Provincia de Buenos Aires (IVBA) puso el foco para encarar un proyecto cuya idea madre viene de larga data: la construcción de casas bioclimáticas. Se trata de viviendas que funcionan con energía solar y favorecen tanto el ahorro energético como el cuidado del ambiente. Juntamente con el IVBA trabajan la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y, lógicamente, funcionarios de la municipalidad de Tapalqué.
“La idea surgió hace cinco años, pero el proyecto tomó forma mucho después. La idea se propuso desde el departamento de Proyectos del IVBA y luego debió ser consensuada por las direcciones y autoridades correspondientes, además del resto de los organismos que se invitaba a participar”, explicó la Arquitecta Andrea Lanzetti, Jefa del Área Evaluadora de Sistemas Constructivos del IVBA. De ella surgió la iniciativa, según contó a este medio, el Ingeniero Carlos Discoli, del Instituto de Estudios del Hábitat (IDEHAB) de la FAU-UNLP, donde realiza investigaciones junto al Arquitecto Gustavo San Juan.
Discoli agregó: “A partir de inquietudes propias del IVBA y de los desarrollos realizados durante tres décadas por nuestro grupo de investigación en dicha temática, se planteó la posibilidad de diseñar viviendas con estas características dentro de un organismo público a los efectos de transferir, potenciar y multiplicar las líneas de trabajo realizadas hasta el momento. Este proceso ha tenido antecedentes muy fuertes a partir de 1977 y en la década del ‘80 con programas equivalentes, tales como el “Conjunto de viviendas de alta densidad con utilización de energía solar”, conocido como proyecto CESAD, del cual se construyó un prototipo –hoy desmantelado–, llevado adelante por el Arquitecto Elías Rosenfeld y el Físico Jorge Luis Guerrero, uno de los pioneros en estas temáticas en la Argentina. Estas inquietudes fueron desestimadas por las diferentes gestiones hasta la actualidad, demostrando hoy día una firme idea de retomarlas en conjunto, y eso incluye al IVBA, la FAU-UNLP, el INTI y los Municipios”.
Una de las personas más indicadas para explicar por qué se decidió construir este tipo de viviendas en Tapalqué es el director de Planeamiento y Obras Públicas del distrito, Oscar Salvo. “Cuando nos enteramos del proyecto que tenía el IVBA quisimos ser los primeros porque uno de nuestros principales lineamientos es mejorar la calidad de vida de nuestros pobladores en lo que respecta al cuidado del medio ambiente”, indicó. En esa misma línea la municipalidad de Tapalqué ha ido demostrando cierta sensibilidad a las temáticas ambientales y paisajísticas, mostrándose interesada en consecuencia en el desarrollo de viviendas con estas características. Por su parte, Lanzetti precisó que “cuando (los funcionarios) se enteraron del proyecto mostraron interés de hacer la experiencia piloto”.
El municipio conducido por el intendente Gustavo Cocconi no es el único que ha manifestado su intención de ser parte de la propuesta, dado que desde el partido de Carlos Casares –también bonaerense– ya hicieron una presentación formal para que se estudie la posibilidad de construir casas bioclimáticas allí.
Oscar Salvo, aseguró que los recursos son únicamente públicos y que surgen a partir de un programa de construcción de viviendas provincial, denominado “Solidaridad”. En este proyecto la provincia financia el total de la inversión, que en este caso son cuatro viviendas. “El presupuesto es el mismo que para otras viviendas del mismo plan”, finalizó el representante municipal.
Por su parte, el Ingeniero Vicente Volatino, coordinador de la Unidad Técnica Habitabilidad, del Centro INTI Construcciones, explicó que “el INTI es convocado inmediatamente a sumarse a este proyecto, ya que existe una relación de hace mucho tiempo con el Instituto y además existe un convenio firmado entre ambos por el tema de la certificación de sistemas constructivos. El rol del INTI dentro de este proyecto es el monitoreo de las variables higrotérmicas de los prototipos y la evaluación del comportamiento energético de los mismos mediante programas de simulación numérica. Para este en particular, participarán cinco personas pertenecientes a la Unidad que coordino”. El INTI actualmente también se encuentra evaluando la eficiencia energética de los edificios públicos de la Ciudad de Buenos Aires.
Nota publicada AreaUrbana 28