Conectar lugares remotos es una necesidad y un derecho de los habitantes, pero sobre todo: un desafío. ¿Cómo se logra?, ¿qué tipo de sinergias se necesitan?, ¿cuáles son los principales obstáculos?, AreaUrbana conversó con los protagonistas de distintos proyectos que se están llevando a cabo en el país, con el objetivo de conocer cómo se implementan los proyectos colaborativos que integran esfuerzos de gobiernos, empresas y de la comunidad aledaña.
En Argentina, como en la mayor parte de Latinoamérica, existe una brecha significativa en la implementación de redes de internet en las zonas urbanas y rurales. Esto es un desafío, pero también una oportunidad única para marcar un cambio positivo y tangible en la vida de las personas. En este sentido, varias provincias vienen trabajando con un plan de continuidad para atender las necesidades de sus habitantes; y para lograrlo exitosamente se requieren alianzas estratégicas entre el sector público y el privado.
Un ejemplo concreto es el de San Luis, que en sus 76.748 km², y con una población de 542.069 habitantes, viene digitalizando a su comunidad ofreciendo conectividad gratuita de banda ancha. Su tendido de fibra óptica supera los 7386 km, y el objetivo que se había propuesto hasta diciembre del 2023, fue el de llegar a cada hogar con tecnología FTTH (fibra hasta el hogar).
“La Agenda Digital Sanluiseña se delineó entendiendo que la sociedad del conocimiento y la innovación requiere que todos los habitantes de San Luis participen en su construcción. La inclusión digital de los sanluiseños fue la condición necesaria para el avance hacia la visión de una sociedad inclusiva y necesariamente digital, por lo que, disponer de conectividad, dispositivos y formación es la condición mínima”, dijo Alicia Bañuelos, ex Ministra de Ciencia y Tecnología de San Luis y actual Presidenta de la fundación NAOS.
El rol del Estado es crucial para generar un impulso que haga del acceso a la tecnología una herramienta de productividad y desarrollo económico. En ese sentido, el plan de San Luis llevó una larga data de trabajo sostenido. En sus inicios, por el año 2009, un primer eslabón clave fue lograr la conectividad para las dos ciudades más pobladas de la provincia: Villa Mercedes y San Luis. En ese momento, este servicio fue reconocido como un derecho humano de cuarta generación mediante una enmienda de la Constitución Provincial para reconocer como derecho humano fundamental a la inclusión digital, que sigue caracterizando hasta hoy a San Luis como localidad pionera en reconocer el derecho al acceso gratuito a internet.
“El objetivo es y será lograr la maximización de la digitalización; con iniciativas innovadoras, destinadas a cambiar la historia, a encontrar los atajos al futuro y brindarle a toda la sociedad puntana las mejores herramientas disponibles para hacer frente a las demandas que exige el Siglo XXI”, remarcó Alicia Bañuelos y usó la frase de “soy porque somos”, proveniente de la filosofía sudafricana Ubuntu, que destaca la importancia de cuidar a los otros a partir de comprender que existe un vínculo humano universal que hace que los seres humanos podamos superar los retos porque estamos conectados.
“Sólo el 4,98% de los hogares tienen telefonía fija, y simultáneamente 126,02% de la población cuenta con línea de telefonía móvil. Que este número sea mayor que 100 significa que algunas personas tienen más de un número de telefonía celular. La telefonía móvil vino desplazando la telefonía fija en todo el mundo, y esto también ocurre en San Luis, donde la penetración de internet fija es del 98,55%, esto quiere decir que de 100 personas que habitan la provincia, casi 99 utilizan la red de conectividad fija”. Los datos aportados por la ex Ministra de Ciencia y Tecnología de San Luis nos permiten visualizar el grado de necesidad que implica hoy el acceso a internet y los logros a los que la provincia de San Luis fue capaz de llegar gracias a un trabajo con una planificación en continuidad.
“Ahora tendremos que ver si continúan las inversiones para completar el plan de San Luis. Nuestra idea fue siempre trabajar desde el interior hacia el centro, es decir, de la periferia hacia el centro”, comentó Buñuelos y concluyó afirmando que el principal obstáculo siempre es presupuestario.
Internet satelital en zonas remotas
Otro de los proyectos de inclusión y conectividad fue el que se llevó a cabo en el Delta del Tigre y en San Fernando, Provincia de Buenos Aires, donde la Municipalidad de la zona trabajó conjuntamente con la compañía argentina de conexión satelital Orbith para dar conectividad a zonas alejadas con el objetivo de reducir la brecha digital. En este caso, la empresa aportó su expertise en distintas modalidades de conectividad. “Brindamos acceso a internet a más de 2.000 escuelas rurales en varias provincias y brindamos alternativas que se adaptan a situaciones diversas, como los equipos nómades o campamentos, a los cuales les proveemos la posibilidad de comunicarse internamente. También trabajamos en proyectos de conectividad a lo que se conoce como ‘zonas de fomento’: pueblos que se encuentran en ubicaciones remotas, que no cuentan con conectividad alguna, y donde nosotros instalamos puntos comunitarios de conexión para acercar internet a toda la población”, detalla Paula Ravarino, Gerente de Marketing y Comunicaciones de la marca.
La instalación en las islas del Delta tuvo la particular complejidad producida por el río y los árboles, sin embargo, se logró desarrollar un sistema de instalación que permite hoy a los habitantes de las islas contar con acceso a internet. El servicio de Internet Satelital provisto les permite a los usuarios estar conectados desde sus casas, parques o jardines, pero no se trata de un servicio móvil, por lo que no aplica para ser instalado en embarcaciones, las cuales son muy usuales en esta localidad. “Estamos convencidos de que al llevar internet satelital de alta velocidad a estas comunidades estamos allanando el camino hacia un futuro más equitativo y próspero”, resaltan desde la empresa de telecomunicación.
Buenos Aires: Trabajo mancomunado
En las localidades de Pergamino y Rojas se realizó recientemente la presentación del primer cluster de conectividad rural que alcanzará parte de la zona núcleo de estos partidos en la provincia de Buenos Aires. Este plan es el primer proyecto colaborativo con varias empresas que se asociaron estratégicamente a una cadena de valor del sector agroindustrial y municipios para el desarrollo de una zona de cobertura que continúa en la ruralidad.
El proyecto tiene como objetivo cubrir una extensión de más de 500 mil hectáreas con conectividad continua, donde Telecom estará habilitando siete nuevos sitios móviles con tecnología 4G y redes IoT. En esta línea, AreaUrbana conversó con Juan Pablo Cosentino, Gerente de Desarrollo de Negocios B2B de Telecom, quien explicó que, con dicho objetivo, la compañía se encuentra “trabajando junto a importantes empresas de distintos sectores, desde fabricantes de maquinarias, proveedores de insumos, semillas, aseguradoras, entre otros, para fortalecer la conectividad en regiones rurales claves para la producción agrícola”. Además, detalla Cosentino: “Desde la compañía y las empresas involucradas, buscamos reducir la histórica brecha de cobertura llevando conectividad a la ruralidad, lo que permite impulsar el desarrollo tecnológico del agro argentino; y en paralelo ya estamos trabajando para implementar el mismo modelo en otras industrias por cluster y zonas de influencia, como puede ser la del cítrico en el norte del país y otras similares que reúnen la misma necesidad de conectividad y avance tecnológico en zonas rurales para su crecimiento y desarrollo en el amplio e inclusivo sentido de la palabra, llevando conectividad Asequible, Accesible y Sostenible”.
Las empresas que forman parte de este primer cluster colaborativo son: AGCO, Allaria Agro, Bayer, Case IH, Chacra Servicios, CNH, Corteva, Crucianelli, Banco Galicia, Gear, New Holland, Strix, Plantium, Rizobacter, RUS, entre otras. Junto a los municipios de la ciudad de Pergamino y de Rojas.
Un ecosistema AgTech
La modalidad del cluster representa en la práctica una alternativa que permite acelerar el desarrollo económico local. Como el mismo Gerente de Desarrollo de Negocios B2B de Telecom explicó: “este despliegue se apoya en la identificación de zonas clave de ruralidad donde el impacto de la conectividad puede acelerar el crecimiento, el desarrollo y la inclusión digital de la misma a través de las soluciones que se habilitan a partir de la conectividad”, y detalla que “de esta forma, desde la empresa estamos proponiendo y poniendo a disponibilidad junto con nuestros socios, un camino de respuesta a la ruralidad, atendiendo al impacto social (arraigo, seguridad, salud, educación)y ambiental (huella y control del uso de los recursos), como la importancia para la operación productiva que ofrecen las tecnologías habilitadoras montadas sobre ella para agilizar trámites online, monitorear maquinaria agrícola, garantizar la calidad del producto, eficientizar los procesos en general y permitir la trazabilidad digital o huella digital de nuestras actividades, entre otros beneficios”.
Oportunidades a futuro
Los desafíos a los que se enfrentan tanto las provincias como las empresas proveedoras de telecomunicación, tienen que ver con seguir conectando a las personas, y están llegando a localidades de, incluso, menos de 500 habitantes. Además, se trata de brindar servicio a toda la cadena de valor involucrada, relacionada y afectada por la conectividad en cada zona. “Para acciones como esta, es indispensable el espíritu colaborativo para hacer sostenible este desarrollo. No solo entre sectores privados, junto a socios estratégicos que posibilitan este proyecto, sino también es clave el compromiso público, en este caso con los Municipios, para facilitar el despliegue de infraestructura necesaria”, explican desde Telecom y destacan que ya están llegando a un 97% de cobertura del total de la superficie en los partidos en los que se involucraron y alcanzando a más de 134.000 personas. “Uno de los objetivos que tenemos con este proyecto es continuar resolviendo los desafíos sociales y productivos a las más de 21 localidades que estarán alcanzadas. Además, agregamos valor y colaboramos con las necesidades de las áreas de salud, seguridad y educación acercando nuevas oportunidades para mejorar el desarrollo y evolución. En materia productiva, habilitamos el despliegue de nuevas soluciones de valor agregado que permiten conectar máquinas, equipos, sensores, dispositivos, etc”, concluyeron desde la compañía.
Con la concreción de estos proyectos y el despliegue de estos sitios, la conectividad en zonas rurales y las soluciones IoT aplicadas, se logra también el objetivo de reducir la huella de carbono a raíz de los ahorros y beneficios que son derivados de las novedades tecnológicas que permiten a los productores agropecuarios evolucionar su actividad con prácticas más previsibles, monitoreadas en tiempo real, con significativos ahorros de eficiencia energética y tiempo a su operación diaria.
MARIANA BRIZI