Ushuaia apuesta por la gestión sustentable

Ushuaia, la ciudad más austral del país y del mundo –ubicada a más de 3.000 km de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires-, tiene una impronta sustentable que busca revalorizar como un atributo.

Ushuaia, capital de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, fue fundada el 12 de octubre de 1884 y a partir de allí comenzó a crecer en población e infraestructura para convertirse en la ciudad actual con una población de más de 80.000 habitantes y gran desarrollo económico.

Como parte de su crecimiento, desde la gestión municipal, la sustentabilidad y el cuidado ambiental se ha vuelvo un punto clave. Así han comenzado a trabajar en la gestión de residuos, movilidad sustentable y la disminución de la huella de carbono.

La Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Municipalidad de Ushuaia, nace en 2016 y desde allí empieza a generar agendas políticas. “Se empiezan a fortalecer las políticas vinculadas con la sostenibilidad de la ciudad, para mejorar la calidad de vida de las personas y puntualmente pensando en el ejido municipal de Ushuaia”, informan desde la Secretaría.

Actualmente, están trabajando fuertemente con programas de financiamiento internacional, financiamiento nacional y de la gestión local.

En esta línea, forman parte del Programa GEF 7 “Ciudades Sostenibles: inversiones integrales bajas en carbono y conservación en ciudades argentinas”. Una incitativa llevada adelante por el Ministerio de Ambiente de Nación y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), con el apoyo financiero del Fondo Mundial para el Medio Ambiente(GEF). Esta iniciativa reúne a cinco ciudades en total –Mendoza, Salta, General Pueyrredón y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires- para acelerar el desarrollo urbano sostenible y resiliente frente al cambio climático. “La idea es poder realizar propuestas replicables que puedan adaptarse a los diferentes territorios”, explican desde la Secretaría.

Las obras incluirán, en el caso de Ushuaia, un grupo de construcciones relacionadas con la eficiencia energética y la conservación de la biodiversidad, un programa de conservación de turberas y bosques nativos, además de consultorías para plataformas digitales y para un plan estratégico.

De esta manera, la participación de este programa involucra cuatro componentes: el primero, es el desarrollo de un plan estratégico para Ushuaia que haga énfasis en su inserción paisajística, ambiental y social. Actualmente están trabajando en su creación. 

El segundo componente está vinculados a la realización de varios proyectos pilotos con características sustentables. Uno de ellos incluye la aplicación de diferentes acciones como el aumento de espacios verdes públicos, fomento a la economía circular, la eficiencia energética en los edificios y el desarrollo de ciclovías y sendas en un barrio de la ciudad.

El tercero es una es una plataforma que incluye indicadores de diferente índole como ambientales, económicos, de desarrollo humano, entre otros. “Es una plataforma que busca sistematizar la información y facilitar la toma de decisión tanto de los niveles políticos como de los niveles técnicos.”, detallan.

El último componente abarca la aplicación de elementos o herramientas que les permita a los vecinos elegir ciertas opciones sustentables y que fomenten algún tipo de beneficio económico y al mismo tiempo generen un beneficio ambiental, por ejemplo, elegir equipamientos más sustentables. En este sentido, indica que es necesario trabajar sobre nuevas normativas o el Código de Edificación.

Otra política clave, indican desde la Secretaría, es la Estrategia Local de Movilidad Sostenible, desarrollada durante el 2021 en conjunto con el Ministerio de Ambiente de la Nación. La misma cuenta con el desarrollo de una ciclovía, denominada Pensar Malvinas, de casi siete kilómetros de extensión, uniendo el inicio de la ciudad con su centro. Asimismo, dentro de un futuro próximo, la Estrategia planifica una red de tránsito de bicicleta que cubra diferentes itinerarios por toda la ciudad.

Por otro lado, se avanzó en el Plan Local de Acción Climática (PLAC), que es el plan de la ciudad en función de la acción climática. Como parte del Plan, la ciudad finalizó su primer inventario de gases de efecto invernadero considerando como año base el 2018.  Según los resultados se emitieron un total de 774.707,71 tCO2, un 59,2% de las emisiones proceden de la Energía Estacionaria, seguido por el sector Transporte con el 36,3% y en último lugar se encuentra el sector de Residuos con un 4,6%.

Asimismo, para poder reducir los gases de efecto invernadero, la ciudad estableció 28 medidas de mitigación en dichos sectores. En esta línea, por ejemplo, las nuevas urbanizaciones se plantean desde un concepto de sostenibilidad ambiental con acciones concretas de mitigación de la emisión de gases de efecto invernadero, como la movilidad sostenible integrada, a través de bicisendas, ciclovías y nuevas conexiones de transporte público; la producción hortícola y forestal local a partir de invernaderos eficientes para la producción anticipada de plantines y la eficiencia energética en viviendas, a partir del diseño y construcción de un prototipo piloto de eficiencia con altos estándares energéticos.

Continuando con el cambio climático y las políticas de adaptación, detallan que uno de los ejes que está gestión definió como una política pública es el desarrollo reservas naturales. En la actualidad, existen nueve reservas naturales urbanas con diferentes características y todas tienen una comisión de manejo y están trabajando en el proceso de realización del Plan de Manejo. De esta manera, se busca preservar la biodiversidad y los servicios ecosistémicos que brindan los bosques y turbales a la ciudad y los vecinos.

Este tipo de acciones, permitió a posicionar la ciudad en algunas agendas europeas, por ejemplo, es signataria del Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energía, una alianza global de ciudades y gobiernos locales voluntariamente comprometidos con la lucha al cambio climático, reduciendo sus impactos inevitables y facilitando el acceso a energía sostenible.

En esta misma línea, la ciudad fue sede del encuentro de BiodiverCiudades de América Latina y el Caribe, organizado por CAF con la participaron 40 alcaldes de América Latina. El objetivo del encuentro fue reincorporar la biodiversidad a la matriz urbana, desarrollar la competitividad de base biológica; entre otros. 

“Esto ha generado una agenda ambiental fuerte y con gran interés por parte de la comunidad”, destacan desde la Secretaría y agregan que es una comunidad que tiene muy presente las cuestiones ambientales. “Sea desde organizaciones nacionales o instituciones provinciales, incluso entidades autárquicas, como, por ejemplo, el Instituto del Deporte que, a través de estas agendas, ha empezado a desarrollar actividades deportivas vinculadas con la acción climática”, informan.

También destacan la participación ciudadana en la presentación de estos programas, donde invitan a diferentes actores, representantes de la ciudad como cámaras, colegios, instituciones de nivel superior o universidades.  “Cada uno tienen un compromiso desde su lugar”.

En cuanto a la educación, llevan adelante El Programa de Educación Ambiental “De la Escuela a la Cuidad”, que recorre durante el año los distintos centros de formación, jardines, escuelas primarias y secundarias para enseñar sobre temas como compostaje, reservas naturales urbanas, ciudades sostenibles, movilidad urbana, eficiencia energética y separación de residuos.

GESTIÓN DE RISDUOS

Otro de los principales ejes de trabajo es la gestión de residuos. La ciudad cuenta con más de 100 puntos que reciben PET, vidrio y aluminio. Estos materiales tienen un circuito de recuperación y de disposición o de llegada al mercado recuperador. Actualmente están trabajando con una prueba piloto de separación in situ en un barrio. En este caso, un día a la semana se separan los residuos secos, se recolectan y se llevan a un centro de recuperación. “El objetivo es poder replicarlo y llevarlos a los diferentes barrios de la ciudad”, añaden desde la Secretaría. 

La gestión de los residuos es un tema desafiante, advierten, por la condición insular y la distancia a los mercados recuperadores. Además, los materiales para llegar al continente deben pasar por Chile. Más allá de los desafíos se ha incorporado y se incorporará maquinarias para fortalecer las políticas públicas de recuperación y de reciclaje de materiales.

Asimismo, la ciudad suscribió un convenio con diez gomerías donde los comercios realizarán el acopio de los neumáticos descartados por clientes y vecinos. La Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable se encargará de la logística para su posterior retiro y disposición final con el objetivo es disminuir el impacto ambiental que generan los distintos tipos de residuos y continuar impulsando el modelo de economía circular. 

Estas políticas son importantes, ya que la ciudad ofrece como valor agregado su naturaleza. “Una de las actividades principales es el turismo de naturaleza en la ciudad y es uno de los ingresos genuinos de divisas y los turistas vienen a buscar ese contacto.”, destacan.

DESAFÍOS POR DELANTE

Con respecto a los desafíos de llevar adelante una gestión ambiental, nombran, por un lado, tener un criterio acorde, esto quiere decir, que los equipos técnicos puedan identificar cómo hacer las obra, si son viables o si es necesario su modificación. “Desde el área técnica los desafíos están vinculados a poder compatibilizar las ideas, las propuestas y de poder materializarlas en un proyecto que sea factible de desarrollar y que pueda avanzar”.

Otro desafío es acompañar las necesidades de la agenda política. “Esto también es una responsabilidad de los equipos técnicos, de entender la necesidad, acompañarla y hacer propuestas superadoras”, aseguran.  Para ello, es clave tener un ida y vuelta con los decidores políticos. “Si queremos que tener un producto final, que sea un proyecto ejecutable, lograr un financiamiento y materializarlo en una obra pública o en un programa puntual se debe tener cierta flexibilidad”. Igualmente destacan ser receptivo a la comunidad y de llegar a un consenso, ya que ellos también son actores de la ciudad. “Es un gran desafío que tenemos por delante, se viene trabajando y hay que seguir profundizando”, afirman desde la Secretaría.

En este sentido se puede validar y legitimar con la comunidad mediante instancias de gobernanza ambiental y participativas. “Pensar de manera flexible en el desarrollo de la ciudad es uno de los desafíos desde todos los roles”.

Por último, comparten los objetivos para trabajar este año. En primer lugar, indican que “Dentro de la estrategia de movilidad, se puede trabajar una estrategia de peatonalización y poderla desarrollar con otras áreas del Municipio, ya que la ciudad también lo necesita. Es clave trabajar una estrategia vinculada con la peatonalización de los espacios públicos”. En segundo lugar, nombra que es necesario ocuparse en una nueva normativa, acorde a los nuevos materiales disponibles y a las nuevas tecnologías como las energías renovables. “No sólo la municipalidad debe hacerlo, sino que se debe trabajar de manera conjunta con instancias participativas.”, finalizan desde la Secretaría.

POR DESIRÉ SALVADOR

José Abel Autor