El intendente cordobés que hace la secundaria durante su mandato

La comuna rural de Tinoco está ubicada a en la provincia de Córdoba. En los últimos años hizo una importante campaña para que se instalarán empresas en el lugar y se radicaron varias compañías. Esto dejó dio como resultado que hoy tenga desocupación cero. Es un lugar tranquilo y poco turístico, pero sus habitantes quieren que su pueblo se conozca en todo el país. AreaUrbana dialogó con el presidente de esa comuna rural, Gustavo Bustos, quien contó como es el día a día de esta comuna cordobesa. 

¿Cómo evalúa la situación económica y social de Tinoco?

Nuestra realidad es muy diferente a la que se ve en el resto del país. En el año 2015 implementamos un proyecto para traer empresas que se instalen en nuestro pueblo, dándole las posibilidades de reducción de impuestos y de los servicios, al menos por 20 años, para que puedan trabajar libremente. El principal objetivo era crear fuentes laborales que es lo que más necesitábamos en el interior de Argentina. Así se instaló, entre otras más pequeñas, una empresa avícola, que es una incubadora totalmente diferente a lo que son los criaderos de pollos. Una compañía grande donde se procesan más de 100 pollos por semana. A su vez tienen cuatro granjas, aparte de la incubadora, para la reproducción. Y esto hizo que el lugar creciera de manera exponencial. 

¿Esta y otras empresas permitieron entonces paliar la desocupación en la comuna? 

La inauguración de esta empresa se produjo entre 2018-2019, el año siguiente vino la pandemia y lo bueno es que a nosotros no nos afectó para nada. Hoy podemos decir con orgullo que tenemos un pueblo con cero por ciento de desocupación. 

En estas empresas trabajan gente joven, tanto como hombres y mujeres, que están prácticamente las 24 horas al pie del cañón.

¿Cuánta gente vive hoy en Tinoco? 

Hoy viven cerca de 400 personas, y total son unas 50 familias. Hace poco tiempo logramos hacer un barrio paralelo al pueblo, son 65 lotes. Es decir, que prácticamente en poco tiempo se duplicó la población. Son lotes con viviendas propias para que acceda la gente del pueblo. En ellas viven familias jóvenes, que nunca hubieran podido llegar a tener un lote para el inicio de sus casas. Así logramos hacerlo, entregándolos libre y gratuito. Eran los ex terrenos del ferrocarril, que fueron dados a nuestra comuna, los loteamos y en el que ahora están implementadas las viviendas. 

¿Ésta es una de las obras más importantes que hicieron en la comuna?

Sin dudas era una de las obras más urgentes, la de la vivienda, y que la gente nos reclamaba. Otra de las obras destacadas en la escuela. 

Cuando yo arranqué en el 2003, la escuela primaria era simplemente un edificio. Luego incorporamos el jardín de infantes, la escuela secundaria y hoy tenemos el Centro de Educación de Nivel Medio para Adultos (CENMA).

Hablando de su vida personal ¿Cómo empezó su carrera política? 

Vengo de una familia que trabajó mucho en la política. No trabajaban como empleados ni eran parte del gobierno, sino que eran simplemente colaboradores. Mi padre y mi abuelo, que fueron toda la vida políticos natos, nunca quisieron ocupar cargos, así que yo me crie en ese ambiente. 

Mi historia tiene mucha relación con la del lugar donde vivo. Tinoco es un pueblo de mucho trabajo, está ubicado en el interior del interior de Córdoba, donde en el año 1928 se instala por primera vez el Ferrocarril Belgrano que salía de Alta Córdoba capital pasando por Tinoco y ese tren llevaba a Santa Fe. En 1976, cuando viene el golpe militar, fuimos la primera vía que se levanta de la provincia de Córdoba. Eran las vías del Tren Belgrano Cargas un importante vínculo con el Puerto de Santa Fe. Entonces quedamos prácticamente aislados de todo, porque el único medio de transporte en aquellos tiempos era el tren. No había otra alternativa de transporte ni colectivo, ni nada. Estamos a 50 kilómetros de Córdoba, que no son muchos, pero, en aquellos tiempos, eran de tierra. Y el tiempo nos fue dando posibilidades para que el pueblo de una vez despertara, porque la verdad que estar no tan lejos de la capital provincial tampoco era tan difícil buscar alternativas. 

Siguió transcurriendo el tiempo, y al quedar aislados sin el tren, la gente vendía los campos y se compraban una casa en Córdoba pensando que les iba a quedar mucha plata en el banco y así fueron desapareciendo los pueblos. 

En el año 1995 se vota por primera vez en Tinoco y así se comienzan a formar las comunas. Con esta votación se abren por primera vez mesas electorales y en la comuna gana el partido peronista. En aquel momento era gobernado Ramón Mestre. Y bueno, de ahí en más se trabajó muy duro y en el año 1998 cuando se vuelve a repetir la elección en la provincia gana José Manuel de La Sota. En ese momento era presidente de comunas, Andrés Díaz.

Ya en el año 2003, que había de vuelta elecciones, un grupo de personas mayores, donde estaba incluido mi papá, se organizan para presentarse en el proceso electoral. Yo en ese tiempo militaba, pero muy poco, porque los tiempos míos no me daban mucho porque trabajaba mucho en el campo con mis hermanos en Córdoba. Este grupo de políticos se juntaba en la semana en la casa de mi viejo, que tenía negocio, y le plantaron que tenía que ser yo el candidato a la comuna. Una noche mi papá me habla y me dice, “mira, esta noche va a venir mis amigos políticos, y te van a pedir que vos seas el candidato a presidente de la comuna de Tinoco”. Esos políticos eran los históricos en aquel tiempo, los caudillos peronistas que había en el pueblo, muy respetados. Siguiendo con la historia, yo le respondí a mi padre que no tenía tiempo para asumir esa responsabilidad, ya que también trabajaba en el negocio familiar que era una carnicería.

¿Cuántos años tenía usted cuando le pidieron que sea candidato?

Tenía 37 años. El asunto es que llega esa gente a mi casa noche y, bueno, y me dijeron que querían hablar conmigo. Así que los recibimos y tuvimos esa la conversación que te comentaba. Esto fue a fines del año 2002. 

El grupo de políticos peronistas que me habían convocado para presentarme como candidato me remarcaba que yo era la única persona en el pueblo que tenía llegada a toda la gente, joven y grande. Esto creo que tenía que ver con la crianza que tuve desde pequeño, donde siempre me dirigí a todos con respeto. En mi casa, mis padres, toda la vida tuvieron negocio, y yo siempre estuve involucrado, a veces con las personas mayores, escuchando cómo se trabaja en el campo y con los valores que me inculcó mi familia. Todo eso me fue dando algunas posibilidades, no solo de experiencia, sino de escuchar y de acatar algunos consejos.

El asunto es que llegó fin de año, en enero del año 2003, me vuelvo a juntar con estos políticos porque me piden, y ya fue más grande la reunión, ya no eran tres o cuatro, ya eran como diez, y todo era de la misma historia, pidiéndome que sea el candidato. Así que bueno, yo ya tenía familia, hijos, estaba casado, y así me decidí a ser el candidato. Desde ese momento empecé a trabajar.

¿Y qué sucedió con los otros candidatos que también venían militando y quería el cargo?

Recuerdo que la persona que estaba como presidente de la comuna, que también era peronista, se enojó muchísimo. Y bueno, fui a hablar con este hombre, y le dije que él había hecho dos mandatos y que yo podía ser el tercero, y después si estaba todo bien, él podía volver. Estaba a punto de jubilarse, y me dijo que le quedaban dos años, y después tenía pensado retirarse. Entonces viene, un legislador de la provincia, y le ofrece llevarlo a trabajar a la legislatura con un sueldo mayor. Pero no quiso y en el 2003 él también armó su lista, yo armé la mía y competíamos con otra lista más de otro partido. Yo les gané a todos. En aquel momento votaron cerca de 120 personas, teníamos un padrón chico. Yo saqué casi el 70 por ciento de los votos, y ni contándose las dos listas de los otros me ganaban a mí.

Así que ahí hice el primer periodo, 2003-2007. Pasaron los años y para el período 2011 y 2015 no tuve oposición. Fui con lista única. Recién en el 2019 volví a tener oposición, con otra lista. También le gané con el 83 por ciento de los votos. Hoy se está cumpliendo mi quinto mandato frente a la comuna de Tinoco y el 10 de diciembre de este 2023 cumplo 20 años de gestión. 

Es noticia que en la actualidad está terminando el secundario mientas ejerce como intendente ¿Cómo surge esto?

Siempre fue una deuda pendiente que tuve conmigo. Yo soy el mayor de los hijos, en mi familia, éramos cinco hermanos. Por esta razón, cuando yo termino la escuela primaria, mi papá me dijo que como era su hijo mayor tenía que dejar los estudios y ayudarlo con las tareas del campo. No me arrepiento porque mi padre me enseñó lo que es la vida, me enseñó las experiencias del trabajo y la responsabilidad. Gracias a él soy lo que soy. Pero el único estudi que tenía era la escuela primaria. 

Cuando arranqué en el 2003, en Tinoco, había mucha deserción escolar porque los chicos, terminaban la escuela primaria y no sabían a dónde ir. Quedaban en el campo, algunos emigraban a Córdoba o a las ciudades más cercanas para estudiar, donde muchos no se acostumbraban y tenían que volver. Y en el 2005, en mi primera gestión, hicimos la apertura del CBU (Ciclo Básico Unificado) que eran tres años. Y después logré que se continuara con los tres años más para hacer ya la secundaria. Fueron varios años de lucha para tratar de lograr estos, para la gente que como yo no pudo estudiar. En 2022 tuve la suerte de hacer una sede de este CBU en Tinoco y ahí se abre la sede del Centro de Educación de Nivel Medio para Adultos (CENMA) y yo fui el primero que se anotó. Y estoy orgulloso de ello porque, por ejemplo, tengo una compañera que tiene 81 años, y que estudia. La verdad que algo me emociona y me alegra. La acción más importante de mi gobierno fue la de permitir que mi pueblo acceda a la educación 

Cuando me hice cargo de la comuna, lo único que había era una escuela primaria y un jardín de infantes, que ni siquiera tenían edificios propios. Hoy cada uno tiene sus instalaciones propias y está el CENMA para adultos mayores. Así hemos complementado todos los ciclos educativos.  Si los pueblos del interior no tienen educación se quedan en el camino. 

¿Cómo ve su familia su participación política? 

Como hace 20 años que soy político, ya están acostumbrados. Tengo esa suerte y sigo disfrutando lo que hago. No voy a poder repetir otro mandato porque la ley no me lo permite, ya que en el 2017 se votó la ley nacional que no autoriza la reelección. Igual estoy entusiasmado porque en Tinoco hay un grupo de jóvenes que está trabajando y mi hija mayor forma parte de ellos. Nunca hice hincapié o nunca impuse de que pudiera ser ella la que lleve los destinos del pueblo, porque yo tengo un equipo que viene trabajando desde hace 20 años junto conmigo y también tienen las mismas posibilidades que tengo yo de que ellos pueden ser los candidatos, pero mi hija podría ser la próxima intendenta del lugar. 

Desde hace 5 años se logró armar un grupo de jóvenes que preparan fiestas familiares, de fin de año y las fiestas patronales, y que están muy involucrados y colaboran con lo que es la organización de nuestro pueblo. Estos jóvenes son los que tienen que seguir mi camino y continuar con las acciones políticas de Tinoco. Aunque no estuvieron, al comienzo, muy convencidos de poder asumir ese desafío porque el pueblo creció mucho en los últimos años, luego se convencieron. Así entre ellos mismos decidieron que tiene que ser Dalma, mi hija mayor, la que continuara con el trabajo que yo comencé hace más de 20 años en mi comuna. Lo bueno es que nunca impuse esta idea, sino que salió su posible candidatura por el consenso de más de 40 jóvenes de Tinoco, y tengo la alegría y el honor y el orgullo propio del padre de que es mi hija la que va a seguir mi camino. 

¿Se ve en algún cargo provincial o nacional dentro de 10 años? 

Dentro de 10 años voy a tener 68 años. Ya tengo nietos, y tengo otros 3 hijos maravillosos que les estoy pidiendo acá todos los días que me den nietos, disfruto de ellos y bueno, la verdad que he pasado por todo esto. 

Soy presidente de una bella comuna, tuve la suerte de estar dos años en la provincia con mi querido amigo y compañero de la vida José Manuel de la Sota, como director general de todos los municipios y las comunas de la provincia, y creo que ya cumpliré mi ciclo dentro de la política. 

El ser político es un trabajo de todos los días, es permanente, y uno con 20 años de gestión, ya tiene ganas de dar un paso al costado, descansar o ver qué se puede hacer. Por supuesto, uno en la política, el día que se va es cuando se muere, uno nunca se va de la política, el que le gusta la política, como me gusta a mí, siempre sigue conectado. 

Yo no me auto propongo, ni pongo el callo adelante del caballo porque no sé lo que puede pasar, pero bueno, estoy tranquilo, disfruto de la vida, de lo que hago, y ahora tengo que ayudar también a mi hija, que va a ser la próxima presidente de la Comuna de Tinoco, así que vamos a estar siempre involucrados. 

 

JOSÉ A. LEMOS

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José Abel Autor

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