Convivir con la IA y sacar provecho para municipios

Marcelo Ferreyra es subsecretario de Modernización, Ciencia y Tecnología del Municipio de Trenque Lauquen desde 2015. Asumió el cargo con el objetivo de presentar diferentes desafíos para modernizar a la ciudad de la Provincia de Buenos Aires desde las nuevas miradas tecnológicas con la Inteligencia Artificial como un amigo a conocer en profundidad.

“En el área de Modernización los objetivos son proveer la tecnología necesaria para optimizar la gestión interna y facilitar el contacto de los vecinos con el municipio”, se presenta  Marcelo Ferreyra para “impulsar una sociedad basada en el conocimiento”.

En sus inicios laborales, Ferreyra cuenta con su paso por el INTI entre 1983 y 1987 donde se encargó del desarrollo de programas de Inteligencia Artificial. Desde 2007, hace ya 16 años, es director en Dataxplore siendo responsable del desarrollo de Powerhouse, software de Data Mining basado en la Teoría de la Información y Consultor de Data Mining. Dentro de sus aptitudes se encuentran la de ser conocedor de Ciencia de datos, Algoritmos de aprendizaje automático, Análisis exploratorio de datos y Algoritmos.

En septiembre de 2022, Trenque Lauquen anunció su decisión de poner en marcha la Gestión Documental Electrónica (GDE), es decir, la despapelización del municipio. Se firmó un acuerdo con Nación para comenzar a reducir la cantidad de impresiones para trámites internos y otras tareas. Una iniciativa a la que también se sumaron el municipio de Villarino, Junín de los Andes (Neuquén), Rawson (San Juan) y San Pedro (Jujuy).

La Subsecretaría de Innovación Administrativa de la Nación es la encargada de asistir a municipios en la implementación del sistema de GDE. Se contactó con Trenque Lauquen, firmaron los convenios para implementar el sistema que busca reducir el uso de papel y disminuir los tiempos de trabajo para los trámites. Ferreyra explicó que era un proyecto en mente para el municipio: “Habíamos comenzado hace tiempo a tratar de bajar el consumo de papel. Desde hace un año, los recibos de sueldo están en un servidor y eso disminuyó las impresiones, pero cuando vimos la posibilidad de arrancar con la Gestión Documental Electrónica nos pareció fantástico”.

El GDE se implementó primero en los pedidos de licencias y de horas extras, que dejaron de ser notificaciones en papel para pasar al plano virtual. De ahí, el camino es seguir con todas las áreas, incluidas las compras “que utiliza mucho papel para la impresión de documentación”. Conseguir reducir el uso de papel y la agilidad de las tareas.

¿Cómo se avanzó con el proyecto de la GDE?

Al principio hubo que conseguir un equipo para llevarlo adelante, analizar qué es lo que podíamos poner en marcha y capacitar a la gente: teníamos más de 100 usuarios. Después fue poner en marcha algo que tocara todas las áreas y de manera simple, que son los trámites internos a través de Recursos Humanos. Ahora estamos en período de implementación por el receso de vacaciones (al momento de esta entrevista). Retomamos el tema desde febrero y las áreas ya la están usando. Nuestra idea fue sacar de encima todos los papeles y hacer los trámites más ágiles. Por ejemplo, todas las notas internas que se mandan por mesa de entrada, se hacen en varios lugares alejados. Tenemos ciudades chiquitas como 30 de Agosto y Berutti y otras más pequeñas que son seis o siete ciudades que para mandar una nota por mesa de entrada es un despelote, tenés que traerla o debe venir alguien a hacer el trámite. De esta manera es inmediato, la agilidad que le da este sistema es mucho mayor.

Es ahorrarse diferentes pasos en los trámites que son engorrosos…

Exacto. Pero es todo interno. Aún no usamos esto para el vecino, que sigue haciendo el trámite y se digitaliza en ese momento.

La primera etapa fue convencer a la gente del municipio que trabaja en este proyecto de la necesidad de su uso, ¿cómo reaccionaron?

Exacto y te digo que la gran mayoría vio casi inmediatamente la ventaja y lo hicieron con mucho gusto. No encontramos resistencia. Quizá porque de cada área venían dos o tres personas que estaban acostumbrados a trabajar con papeles. Muchos de ellos nos decían “qué bueno esto, que puede agilizar el trabajo de una manera increíble.

 ¿Cómo contemplan este proyecto para los adultos mayores que son los más resistentes al cambio y a la tecnología?

Es cierto que hay áreas con personas no tan acostumbradas a la tecnología y que les cuesta. Nos pasa en salud. Pero de todas las áreas involucramos a 2 o 3 personas que fueron seleccionadas porque son las que más acostumbradas están a este tipo de trabajo. No tuvimos inconvenientes. Por ahora el GDE es interno, usado por empleados municipales. 

Aún no está implementado en los vecinos. Estamos al tanto de los problemas que ocasiona la tecnología a los jubilados. Pusimos en marcha hace varios años un punto digital para ayudarlos a hacer trámites digitales. Y vimos tecnologías capaces de ayudar a personas con disminución visual, les ofrecimos trabajar con Alexa de Amazon y están chochos. Salen más baratas que un celular, incluso para quienes piensan comprarla. Si bien la tecnología complica a los mayores, tenemos que darle una mano. Intentamos hacerlo con cursos, incluso, para que aprendan a usar un celular. Es estar lo más cerca posible, que se involucren con la tecnología, que usen un mail o ayudarlos con eso porque es fácil no saber usarlo, perder una clave o desconocerla. 

Hace tres años, pusimos los recibos de sueldo digitalizados en la web y evitamos la impresión, las firmas de dos copias de los tesoreros porque se gastaba papel, tóner, impresora. Al principio tuvimos bastantes inconvenientes con empleados municipales, no por edad sino por acercamiento a la digitalización: se olvidaban las claves, no sabían cómo hacer, les pedían una mano a los jefes para poder ver sus recibos o imprimirlos porque algunos querían tener el papel pese a tener el historiar online. No confían y es comprensible, pero cada vez son menos. Se acostumbraron.

¿Hay fecha de implementación para los vecinos?

Aún no lo pensamos. Queremos implementarlo internamente lo máximo que podamos durante los próximos meses. Hoy, el vecino tiene contacto con la Municipalidad en temas como la falta de luz, llama al 147 o genera el reclamo por la página. Esto lo implementamos en 2016. Las áreas no estaban acostumbradas a eso, no sabían cómo clasificar los reclamos. Pero generó un orden interno y por ende comenzó a funcionar: se busca por número de reclamo, dirección, apellido, etc. Es la comunicación del Municipio con el vecino en un 90%.

Ahora estamos digitalizando, pero no con el GDE, a los proveedores que mandan a pedir presupuesto. El proceso hoy es que se los mandan, se elige la oferta más conveniente y se le avisa al proveedor que se le va a hacer la compra. Pero el proveedor no puede hacer la factura hasta que no tenga la orden de compra. Recién al avisarle al proveedor, este realiza la factura y comienza su trámite interno hasta que está el pago en cheque o transferencia. Vuelve a hacerse el aviso, se atrasan en tiempos o se vencen los cheques. Es todo manual. Creemos que a mediados de este año lo tendrían funcionando correctamente. 

Lo que sí vamos a hacer con GDE son los trámites internos del RAFAM (Reforma de la Administración Financiera), que es usado por el 90% de los municipios de la Provincia de Buenos Aires y que maneja las compras, fiscalización, RRHH, presupuesto, es un sistema grande donde casi toda la papelería pasa por ahí. Rafam es generador de papeles, por eso queremos empezar por ahí. Esperamos que sea en los próximos meses. Sería un golazo, ahorraríamos en trámites, que se pierdan los papeles, etc. Sería fantástico. El objetivo es dejar de imprimir, de usar tanta cantidad de papeles. Lo ideal sería un municipio sin papeles, no creo que lleguemos a eso, pero sí a reducir bastante su uso.

Tiene un beneficio ecológico y ahorro de tiempo en trámites, pero ¿hay riesgo de perder información o datos importantes con la digitalización?

No, creo que es al revés. Es más factible perder un papel que algo que está en la nube. El GDE lo guarda en la nube de los servidores de Nación, que tienen back up. Puede pasar que no tengas acceso al GDE, pero cuando vuelve la comunicación vas a tener toda la información necesaria. Creo que la digitalización ayuda a la pérdida del trámite. La búsqueda es casi inmediata. Si tenés una pila de papeles y llega un reclamo, tenés que buscar y se puede traspapelar. En el GDE te aparece a los 3 segundos. Las ventajas de la digitalización son enormes y obviamente hay que hacerlo bien porque no es soplar y hacer botellas. El sistema ya tiene varios años y está pulido. No hemos encontrado dificultades. Esperamos ventajas con todo esto. 

¿Qué significa para vos la Inteligencia Artificial (IA), por qué llegamos a ella y hacia dónde nos lleva?

Esto viene de los años 40, con las ganas de hacer una máquina inteligente. Una manera fue de arriba hacia abajo, plantear las grandes reglas para resolver casos particulares. Funcionó muy bien con programas de teoremas matemáticos, resolvía diagnósticos y eran los llamados sistemas expertos. Trataba de sacar las ideas de expertos de un área, como la medicina, y trataba de codificar esas reglas para que el sistema fuera disparando reglas y te llegaba una respuesta. Se pensaba que eso podía resolver todo cuando apareció el proyecto Quinta Generación de los japoneses, a fines de los ‘70, con máquinas inteligentes para el fin del milenio. Pero se dieron cuenta que era muy difícil hacer ciertas cosas que para un niño eran muy simples y para las máquinas era difícil decodificar. Entonces, aparece un investigador, Frank Rosenblatt que piensa una manera para hacer que la máquina piense por su cuenta. Creó Perceptrón, a la que le mostraba imágenes a través de celdas fotoeléctricas. La máquina “veía” esas imágenes y en base a eso, se autoenseñaba a distinguir una imagen de otra. Era algo muy bueno, porque tenían conexiones neurales con el cerebro humano. 

Para el equipo simbólico, el que se manejaba con símbolos, encuentran que iban perdiendo alumnos ante esta nueva corriente y entonces descubren un problema con el nuevo enfoque. Publican el libro “Perceptrones”, diciendo que no podía resolver ciertas cuestiones. 

Recién en 2016 se confluyen tres factores principales para darle el impulso que tiene hoy la IA. Primero, para que las máquinas puedan aprender necesitan millones de ejemplos que fueron sacadas de las redes sociales, de Internet, donde aparece de todo. Es la materia prima. Segundo, necesito máquinas rápidas y entonces las saco de los videjuegos, porque necesitan enorme velocidad para trabajar, con placas GPU que los gamers tienen para poder ganar. Alguien se percató en que estas mismas placas se podían usar para que las redes neuronales artificiales pudieran aprender rápidamente. La tercera son los algoritmos, que también evolucionan de a poco hasta que aparecen las redes neurales profundas, Deep Learning (aprendizaje profundo) que hacen que las máquinas comiencen a aprender de una manera asombrosa y a ganarnos a los seres humanos. Eso para mí es un punto de inflexión: estamos yendo, sin vuelta atrás. El crecimiento de la IA nos dificulta a los seres humanos acostumbrados a pensar más linealmente que exponencialmente.Y la pregunta es, ¿cuándo vamos a tener una máquina que pueda conversar con una persona? ¿O una que tenga conciencia y se parezca a “A.I.”, la película del 2001? Creo que sí va a aparecer, aunque no sé cuándo. Las máquinas van a ser independientes, un Skynet como en Terminator, pero creo que vamos a seguir teniendo el control. Tener el miedo a que la máquina te reemplace o se salga de control o domine el mundo, no creo que suceda.

Lo que sucede es que estamos en manos de las inteligencias artificiales y modelamos nuestro cerebro de una manera distinta a cuando éramos chicos o a cómo lo hacían nuestros padres y abuelos. Las búsquedas en Internet, como Google, hace que yo deje un rastro digital y la plataforma lo va notando y las búsquedas que me va a dar van a ser más acordes a lo que yo espero encontrar. Ahí aparece una de las grandes falacias que hay que evitar, la de la confirmación: si yo quiero estar seguro de que tengo una idea de algo, el problema es que la mayoría de nosotros vamos en búsqueda de la confirmación de lo que pensamos, pero jamás pensamos que deberíamos ir en búsqueda de aquello que refuta lo que pensamos. Internet tiene tanta información, escribe cualquiera, que seguro me voy a encontrar gente que está de acuerdo conmigo. Si yo no estaba convencido o no estaba en contra, probablemente me convenza algo. Primero, tenemos ese riesgo, las búsquedas son estrechas para lo que yo soy. Segundo, pensá la cantidad de información que tienen de mí las IA y de qué manera me conocen. Cuando tenes preguntas internas o sensibles que no se las preguntas a nadie, vas a preguntarlas a Google… eso queda en Google y a ellos les sirve para formar un perfil de mí: Google, Facebook, Instagram, etc. Cada like es un perfil. 

Me recuerda a la invasión de los televisores en Benny Hill, generando caos en la ciudad. Sentimos miedo ante la IA. ¿Crees que podemos convivir con ella o va a venir Terminatora reemplazarnos?

Totalmente, podemos convivir con ella y se busca la flexibilidad para ir cambiando. Va a haber trabajos que quizá van a ser más propensos a ser reemplazados por una IA. Vas a tener que modificar tu experiencia en un tema para ir acomodándote, algo que pasó siempre. Antes se cosechaba a mano y de repente aparecieron esas máquinas gigantes para cosechar, la gente se fue moviendo del campo a las ciudades a buscar nuevos conocimientos para sobrevivir. Hay cierta tensión, pero aparecen trabajos nuevos. Podés negar la IA y pensar que es una moda. Entonces, podés pelear contra ella o trabajar junto a la IA. Esta última opción es la ideal, saquemos el jugo lo mejor que podamos. Hacer que la sociedad sufra lo menos posible la IA. Hay muchos beneficios, hay diagnósticos médicos conseguidos por ella para llevar a pueblitos alejados o a cualquier parte del mundo. 

No necesitás médicos expertos sino IA. Hay aplicaciones en el celular que te permiten ver si un lunar es cancerígeno o no, la medicina nuclear da vuelta al mundo. Va a ir cambiando y los beneficios van a ser mayores que lo negativo. Hay peligros y hay mal uso, pero debemos esforzarnos en sacar el mejor provecho posible tratando de minimizar los riesgos.

Es decir, la inteligencia artificial es un amigo a conocer en profundidad y no un enemigo a vencer…

Totalmente. Nosotros desde Argentina tenemos unas mentes brillantes y hay que aprovecharlos e invertir en ellos. De a poco nos estamos dando cuenta de eso, podríamos estar arriba en investigación y desarrollo en IA, tenemos potencial para lograrlo y desde Trenque Lauquen estamos intentando hacerlo.

 

POR CLAUDIA SETA

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José Abel Autor

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