Desde la perspectiva de la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (Sedronar), la Argentina está “en el peor momento de su historia en cuanto al consumo de estupefacientes”. En su último estudio, de 2017, fueron encuestadas 20.658 personas de entre 12 y 65 años, que, en proyección, representan a casi 19 millones de habitantes. La magnitud del mismo permitió contar, por primera vez, con datos para cada uno de los 23 territorios provinciales y de la ciudad de Buenos Aires.
Los resultados confirman el aumento del consumo de drogas (y también de alcohol) entre adolescentes: en comparación con 2010, en 2017 se duplicó el porcentaje de jóvenes de entre 12 y 17 años que consideran que “no es riesgoso” fumar ocasionalmente marihuana, y se triplicó el promedio de adolescentes que ya habían consumido cocaína al menos una vez en su vida.
Frente a ese escenario, la Sedronar lleva adelante una serie de programas, entre ellos, el de “Municipios en acción”, que consiste en la implementación, el seguimiento y la evaluación de planes locales sobre drogas que permitan trabajar sobre la problemática de las adicciones atendiendo las particularidades de cada localidad.
Esa iniciativa comprende varias líneas de acción:
- Capacitación para equipos técnicos municipales en la elaboración de diagnósticos y en el diseño de un plan local.
- Herramientas para la implementación de estrategias de prevención.
- Cooperación para la instalación de un observatorio local que elabore estudios epidemiológicos.
- Fortalecimiento a actores locales para la atención primaria de la salud.
Formación sobre adicciones
AreaUrbana conversó con la especialista en prevención de la drogadicción Liliana Augusto, que dirige, junto con el sociólogo Ramiro Mendoza Aguila, la Tecnicatura en Prevención de la Drogadicción en la Universidad de Flores (UFLO).
“Cuando comenzamos a dictar la tecnicatura en la UFLO, los consumos no eran los mismos que ahora. Con el correr de los años, nuestra actividad fue creciendo porque aumentaron el consumo de sustancias adictivas y también las adicciones a la tecnología, a los juegos, al sexo y al trabajo”, aseguró Liliana Augusto.
Consultada acerca de la actitud asumida por los gobiernos locales frente a esta problemática, la docente señaló que, “si bien el tema de las adicciones preocupa, no muchos se ocupan de ello. Algunos municipios han realizado en los últimos años acciones al respecto. Es un trabajo arduo y se necesita de capacitación para poder actuar correctamente. La Universidad de Flores tiene programas para capacitar en los municipios, como el convenio firmado en 2017 con la Municipalidad de La Matanza, a través del cual formamos Operadores Universitarios en Adicciones y también pusimos en marcha un programa de investigación y abordaje del consumo problemático. La idea es poder extender este programa a otros municipios”.
A juicio de Augusto, “sería ideal que cada municipio abordara este tema en forma integral, trabajando con diferentes áreas, como desarrollo social, educación, salud mental y adicciones, juventud. Es una problemática transversal y afecta indistintamente a toda la población, ya que el consumo de algunas sustancias se ha naturalizado. Es mucho lo que se puede avanzar desde los municipios en prevención, en educación y en asistencia”.
La Tecnicatura en Prevención de la Drogadicción que se dicta en la UFLO es la única universitaria de la Argentina, tiene una duración de dos años y consta de 20 materias. La directora de la carrera comentó que “la materia troncal en primer año es Prevención, y la de segundo año es Asistencia de las Adicciones. Tratamos que la enseñanza sea muy abarcativa y completa: la carrera tiene materias como comunicación, psicología, antropología, farmacología, entre otras; y los alumnos poseen un ámbito de práctica, sobre todo en escuelas. Tenemos un programa que se desprende de la tecnicatura que se denomina Promoción Escuelas Saludables (PROMESA), en el que trabajamos con chicos de nivel secundario, con padres y con personal de la escuela”
Por Mgter. José Abel Lemos
Nota publicada en AreaUrbana 66